La menopausia es una etapa en la vida de la mujer en la que se producen importantes cambios en el organismo, ya que suele aparecer el colesterol, es habitual que se tengan sofocos y se engorden unos kilos. Estas son las principales consecuencias que se notan las mujeres. Pero siguiendo unos hábitos de vida saludables, es posible hacerles frente y sobre todo no ganar esos kilos que están relacionados con las hormonas. Aquí te hacemos un listado con todos los alimentos que debes incluir en tu dieta y que deben formar parte de tu pirámide alimenticia en el día a día.

Cereales

Los cereales son claves en la dieta cuando se tiene la menopausia porque aportan grandes cantidades de fibra. Los más idóneos son el pan, la pasta, el arroz y las legumbres, pero siempre optando por consumirlos integrales.

Frutas y verduras

Las frutas verduras deben ser consumidas diariamente y tienen que ocupar gran parte de las ingestas que se hagan a lo largo del día. Su consumo es fundamental porque aportan fibra, vitaminas, minerales y fitoquímicos.

En total, se recomienda tomar al menos cinco raciones diarias. Puedes elegir tus favoritas para hacer la dieta mucho más llevadera o ir variando para probar diferentes sabores y que la alimentación no sea monótona.

Lácteos

Con la menopausia, hay más riesgo de tener osteoporosis. Un motivo por el que es importante tomar lácteos. Sin embargo, la ingesta debe ser siempre de productos lácteos desnatados porque en esta época en la vida de la mujer suele aparecer el colesterol. Lo aconsejable es tomar entre tres o cuatro raciones diarias.

Proteínas

Es mejor tomar pescado porque tiene grasas más saludables que las carnes. Puedes comer tanto pescado azul como blanco. Las raciones diarias recomendadas son dos, pero siempre en cantidades moderadas.

Grasas

Es conveniente huir de todas las grasas que no son saludables y tomar aquellas que sí aportan beneficios al cuerpo. Estas últimas se encuentran por ejemplo en los frutos secos, que son ricos en grasas insaturadas y componentes fitoquímicos.

Otro buen consejo es tomar margarina en lugar de mantequilla porque es menos grasa, aparte de tener un mayor aporte en ácidos grasos insaturados. Y, para cocinar, lo mejor es emplear aceite de oliva virgen extra.