Las prebases o primer son un producto clave para conseguir lucir una piel perfecta. Además de hacer una buena elección en función del tipo de piel, es fundamental saber bien cómo se utiliza y conocer unos trucos que pueden ayudar mucho a lograr mejores resultados para estar radiante en todo momento. Aquí te contamos algunos que usan los maquilladores profesionales.

Bases

Cuando se ha utilizado el primer o prebase, surge la duda de si hay que poner posteriormente una base de maquillaje. La verdad es que no es necesario. Si no va a utilizarse, lo normal es utilizar una prebase iluminadora o hidratante para que la piel tenga un aspecto más saludable y natural.

La excepción está cuando se tiene acné, manchas o líneas de expresión marcadas. En estos casos, está recomendado aplicar base de maquillaje, sobre todo, si se va a acudir a un evento especial o fiesta.

Sofisticación

Si se quiere conseguir un maquillaje no tan natural, una buena opción es completar el maquillaje con un corrector para, por ejemplo, camuflar ojeras y bolsas. También se pueden usar colorete o polvos de sol para definir el óvalo facial.

trucos-premier
Una buena opción, sobre todo, para esa definición, es el contouring para lo que se debe hacer un número tres con la brocha. La clave está en empezar por la sien para continuar con el trazo por el pómulo y acabar en la mandíbula, pero sin levantar en ningún momento la brocha.

Combinación

Un último truco que conviene saber es que la prebase puede cambiar el maquillaje. En este sentido, se debe tener presente que si la base de maquillaje es muy mate y la prebase es hidratante, se consigue un efecto glowy y un aspecto jugoso.

Pero es importante no pasarse con la cantidad y esperar a que siempre se absorba bien el primer antes de extender el maquillaje.