¿A quién no le gusta tomarse una copita de vez en cuando? Pues bien, debes saber que aunque consumir alcohol está totalmente desaconsejado, tomar una o dos copas de vino tinto al día puede tener beneficios para el corazón. ¡Y no creas que se trata de una de esas leyendas urbanas que van circulando por ahí! De hecho, lo aseguran desde la Fundación Española del Corazón

A continuación te explicamos qué beneficios tiene el vino para la salud y, en concreto, para el corazón. ¿Te gustaría acompañarnos?

Rico en antioxidantes

Lo primero que hay que tener en cuenta es que el vino es rico en antioxidantes, moléculas que pueden ayudar a prevenir enfermedades del corazón. El motivo es muy sencillo: aumentan los niveles de colesterol bueno y protegen las arterias. Lógicamente, un consumo excesivo sí puede tener consecuencias negativas para la salud.

Rico en resveratrol

Por otro lado, algunos estudios aseguran que el resveratrol, otra sustancia que se encuentra en el vino, está relacionado con el riesgo de inflamación y coagulación de la sangre, es decir, que también podría ayudar a prevenir el desarrollo de determinadas enfermedades cardíacas. Además, parece ser que esta sustancia también contribuye al retraso en la pérdida de audición y del envejecimiento en general.

Otros beneficios

Además de lo que te acabamos de comentar, algunos estudios aseguran que el consumo moderado hace que los enfermos de cáncer de próstata no sufran esta enfermedad en su forma más agresiva, evita infecciones urinarias, reduce la posibilidad de tener hemorroides, mejora la piel, evita las varices, disminuye las alergias y reduce la posibilidad de formación de cálculos renales.

Consumo moderado

Lo ideal para que el vino no cause consecuencias negativas es consumir una sola copa al día, preferiblemente con la comida. Eso sí, no deberán tomarlo embarazadas, niños, adolescentes, diabéticos, personas con enfermedades hepáticas, cardiopatías graves o determinadas arritmias o personas que estén tomando determinados medicamentos.