La imagen del recibidor es la primera que percibes al entrar de nuevo en tu casa. Es la expresión de la bienvenida al hogar. Este es un lugar de paso y, sin embargo, una decoración de ensueño hace que te den ganas de quedarte durante más tiempo allí. Un recibidor bonito y acogedor es el anticipo de una vivienda que ofrece este confort a nivel integral.

1. Espejo de cuerpo entero apoyado en el suelo

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Quizá este sea el lugar en el que te mires al espejo por última vez antes de salir de casa. El mejor recibidor es aquel que te parece práctico en tu día a día. Aquí también puede estar situado un zapatero para organizar el calzado. De este modo, podrás calzarte y descalzarte cómodamente en la entrada. Pues bien, un espejo de cuerpo entero te permite revisar tu look o realizarte un último retoque en tu maquillaje.

Un espejo de cuerpo entero, además, es el punto focal de la entrada. Y produce sensación de profundidad haciendo que este lugar parezca mayor de lo que es.

2. Mueble de almacenaje abierto

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No necesitas tener tanto espacio de almacenaje en este rincón como en otras habitaciones de la casa. Pero sí debes contar con la organización adecuada para mantener el orden en la entrada. Un aparador es un básico para amueblar el hall.

Y, además, forma una bonita composición con un espejo. Encontrarás este mueble en un formato abierto o cerrado. En este último caso, puedes utilizar cestas de mimbre. Además de ser muy útiles para mantener el orden, también decoran y aportan un toque natural al look de este ambiente.

Existen distintos tipos de recibidores. Y, en ocasiones, esta entrada está perfectamente integrada en el salón, forma parte de esta habitación.

3. Un juego de cuadros

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Las paredes pueden centrar el protagonismo del recibidor cuando este espacio es tan pequeño que solo puede adornarse a través de los detalles. En ese caso, un juego de cuadros formando un mural original eleva el encanto de esta estancia. Como en cualquier otra habitación, busca la mejor perspectiva de una pintura para disfrutarla realmente. Es decir, elige aquel ángulo desde el que se percibe con más claridad.

4. Un banco zapatero

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Conviene ser creativo para aprovechar al máximo los metros cuadrados de una entrada pequeña. Los muebles multifuncionales, como su propio nombre indica, resultan especialmente prácticos en este contexto.

Existen piezas que pueden convertirse en imprescindibles. Por ejemplo, un espejo con perchero se integra muy bien en este punto. Un banco zapatero fusiona ambos conceptos en un mismo diseño.

5. Mueble suspendido para el recibidor

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Si buscas un mueble que te aporte el almacenaje necesario, pero que ocupe el mínimo espacio, esta propuesta puede inspirarte. Un mueble de líneas rectas destaca por su ligereza visual. La parte del suelo que está situada bajo está estructura queda libre.

Los detalles más sencillos añaden el toque de calidez definitivo a la entrada. Una alfombra redonda, que enmarca este lugar de paso, es un ejemplo de ello.

6. Decoración plateada

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Esta es la perspectiva que muestra este recibidor en la entrada al hogar. Un toque metálico que añade un toque de sofisticación a una decoración elegante. Este es el matiz que diferencia un espejo con un marco en este acabado.

7. Armario con puertas espejo

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Añadir este reflejo al recibidor siempre es una buena idea, ya que esta propuesta realza la amplitud. Pero no existe una única manera de conseguir este objetivo. Un armario a medida con puertas adornadas de este modo es otra tendencia que inspira por su atemporalidad.