Muchas veces, al entrar a una casa con una decoración bonita, vemos que no llega a resaltar del todo, que algo no encaja o falla ligeramente y no entendemos por qué. Puede ser porque la estancia esté ligeramente en penumbra, no tenga la cantidad de luz suficiente, o que el color de la luz no sea el adecuado, que la luz proyecte sombras indeseadas o simplemente, que el tipo de lámparas o elementos de iluminación decorativa que hemos elegido no sean del estilo correcto o no combinen con el resto de la decoración de la habitación.

En este artículo te enseñamos paso a paso cómo elegir una buena iluminación para tu casa y cómo resaltar su decoración y estilo propio.

Paso 1: Saber cuánta luz necesito

Antes de nada, lo fundamental y lo primero que tenemos que saber es cuánta luz necesito en la habitación, para no iluminarla en exceso y deslumbrarnos, pero tampoco quedarnos en penumbra por defecto y no ver bien.  Debemos tener también claros dos conceptos muy importantes: lúmenes y lux. Los lúmenes indican la cantidad de luz total que emite un punto de luz, como por ejemplo una bombilla LED o un plafón. El lux es una medida que nos indica la cantidad de luz por una superficie determinada (1 lux es igual a 1 lumen por 1 metro cuadrado).

Cantidad de luz apropiada

Para calcular la cantidad de luz apropiada para una habitación, tenemos que tener en cuenta los metros cuadrados que tiene la estancia y el uso que le queramos dar o las actividades que queramos realizar en ella.

Los luxes que necesitaremos en cada estancia en función de la actividad, vienen estipulados en tablas normalizadas que, aunque no en todos los casos es de obligado cumplimiento, sí nos pueden servir como guía. A la hora de realizar actividades como leer, cocinar o prepararse en el cuarto de baño son necesarios 538 lux de media en toda la superficie a iluminar. Para una iluminación general o ambiental son necesarios 108 lux de media. Para el pasillo de una casa son necesarios 54 lux de media.

Una vez sepamos los metros cuadrados de las estancias y los luxes necesarios en cada una de ellas, conocer los lúmenes que necesitaremos es muy fácil. Tan solo tendremos que multiplicar la superficie en metros cuadrados por unidades de lux. Por ejemplo, si quiero iluminar un dormitorio con zona de estudio de 9 m2 y los luxes necesarios para esa estancia son 431, para conocer los lúmenes multiplicaremos 431 lux * 9m2= 3879 lúmenes.

Con este dato ya podremos escoger las bombillas LED necesarias fijándonos muy bien en los lúmenes que proporcionan. Si seguimos con el ejemplo anterior, imaginemos que en el dormitorio donde necesito 3879 lúmenes, tengo una lámpara colgante con 6 bombillas LED E27. Esas bombillas deberán proporcionar cómo mínimo cada una de ellas 646 lúmenes para llegar a una iluminación general de 3879 lúmenes.

En el ámbito profesional, estos datos se calculan mediante simulaciones por ordenador. No obstante, en instalaciones domésticas no siempre es necesario y esta guía puede ser útil para una orientación aproximada de la cantidad de luz necesaria.

Paso 2: Saber qué temperatura de color escoger

A la hora de comprar la iluminación para nuestra estancia, una de las características más importantes que tenemos que tener en cuenta al escogerla es la temperatura de color, ya que esto determinará el ambiente, las sensaciones, los estados de ánimo y las emociones que tengamos en ella.

Temperatura del color

Para elegir la temperatura de color correcta primero debemos conocer qué temperaturas de color blanco hay. Podemos encontrar bombillas LED con temperaturas en blanco cálido de 2.700K, blanco natural en 4.000K o blanco frío en 5.000K.

Para estancias donde queramos crear un estado de tranquilidad, relajación y descanso, como pueden ser el dormitorio o la sala de estar, utilizaremos una temperatura de color en blanco cálido para inducir y favorecer el sueño.

Si lo que necesitas es iluminar una zona donde necesites un alto nivel de trabajo y energía, como un despacho, una oficina o gimnasio en casa, las encimeras de la cocina o los espejos del baño, te recomendamos que de forma puntual utilices una temperatura de color en blanco frío.

Para una iluminación más general o ambiental en el resto de espacios, aportando una sensación más vibrante, te recomendamos una iluminación con una temperatura de color en blanco natural, ya que imita la luz natural del sol.

Paso 3: Escoger una iluminación decorativa que aporte

No hay nada peor que escoger una lámpara colgante o un aplique de pared y darnos cuenta de que no combina para nada con el resto de nuestra decoración y que resta más que le suma al diseño de nuestra habitación, sala de estar o cocina.

Iluminación decorativa en casa

Para esto te damos unos consejos con los que no puedes fallar a la hora de escoger la iluminación decorativa perfecta para tu hogar:

  1. Si no sabes qué escoger, no te compliques, ve a lo básico. No te salgas de la paleta de colores ni del estilo que predomina en tu habitación y no correrás riesgos. No elijas nada extravagante, vistoso o que llame demasiado la atención. Optar por algo discreto, como aros empotrables, siempre es un buen recurso. Además, no nos robarán espacio.
  2. Si quieres atreverte con algo más llamativo, prueba con apliques de pared con un estilo similar al del resto de la decoración. No elijas materiales demasiado difíciles de combinar. Escoge algo sencillo y que funcione.

Si quieres arriesgar, puedes optar por lámparas colgantes con mucha personalidad. Son un elemento que pueden crear el contrapunto perfecto y ser el centro de atención o encajar a la perfección con el resto de la estancia.