Con el cambio de estación, los resfriados están a la orden del día. Y aunque el otro día te ofrecimos algunos consejos para aliviar los síntomas de esta enfermedad que puede estar provocada por diferentes tipos de virus, hoy queremos centrarnos solo en uno de los síntomas: la tos. Para ser más concretos, lo que vamos a hacer es darte algunos consejos para aliviar la tos nocturna. ¿Te gustaría acompañarnos?

Consecuencias de la tos nocturna

Aunque la tos puede aparecer en cualquier momento del día, los ataques nocturnos suelen ser bastante frecuentes. El motivo principal de que la tos se acentúe de noche tiene que ver con la postura, ya que al estar recostados o tumbados las vías respiratorias se obstaculizan. Entre las consecuencias de la tos nocturna se encuentra la irritación de la garganta o la falta de descanso para ti y para las personas que comparten habitación contigo. Por eso, queremos ofrecerte soluciones para este problema.

Remedios caseros

Así, lo primero que queremos recomendarte es que bebas mucho líquido para hidratar la garganta y eliminar el exceso de mucosidad. Es preferible, eso sí, que los líquidos sean calientes o tibios. En cuanto a los remedios caseros, uno de los más recomendables es tomar agua con zumo de limón y un poco de miel o, si lo prefieres, leche con miel. Otros recomiendan hacer gárgaras con agua tibia con sal.

Trucos interesantes

Si estos remedios no te acaban de funcionar o quieres probar otras cosas, también es buena idea que chupes caramelos de miel o de eucalipto, ya que te aliviarán gracias, entre otras cosas, a la producción de saliva. Otro truco que puedes probar es el de colocar gotas de aceite de tomillo en la almohada o una cebolla en la mesita.