El color tiene una gran relevancia en el universo de tu hogar. La perspectiva visual matiza un espacio que podría mostrar una perspectiva muy distinta con un tono diferente. Lograr una decoración práctica y relajante es una expectativa posible. De hecho, este es un entorno de intimidad en el que desconectas del ritmo del día a día. En este artículo, mostramos una selección de colores acompañados, a su vez, por espacios que ejemplifican la agradable sensación de calma que producen.

1. Color arena

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Existen tonos que además de muy relajantes son atemporales. Y este es un ejemplo de ello como puedes observar en esta imagen. Cada estancia de tu casa tiene una atmósfera propia. Pero el dormitorio es el lugar en el que conviene cuidar el entorno para propiciar un descanso de calidad. La madera de esta habitación se viste con este acabado.

2. Azul

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Existen experiencias que, vividas en contacto con la naturaleza, propician el disfrute de este color. La observación del horizonte en una tarde de verano o el movimiento del mar son dos ejemplos de ello. Este encuentro con la naturaleza también se disfruta desde el propio hogar al observar el cielo desde la ventana. La presencia del color azul en un inmueble aporta calma, serenidad y relajación.

Incluso cuando no es el protagonista principal de la estancia, consigue brillar con luz propia, como ocurre en el ejemplo de este interior que compartimos a modo de inspiración.

3. Beige

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La decoración monocromática es aquella que utiliza un color para definir un ambiente. Y la utilización del blanco da lugar a espacios luminosos y amplios. Sin embargo, existen otras propuestas que, dentro de la misma línea, dibujan entornos agradables y acogedores. El beige es uno de los tonos más utilizados para pintar las paredes. Pero, además, también forma una bella combinación con el blanco.

Este salón muestra una composición en la que todo está perfectamente dispuesto para realzar el protagonismo de la chimenea.

4. Rosa

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El color rosa aporta un toque romántico a la decoración. Existe un recurso universal para añadir esta nota decorativa a una habitación: las flores. Flores que se convierten en el centro de atención al embellecer un mueble.

Las flores decoran el aparador de este ambiente. Y las lámparas, situadas a ambos lados, realzan el efecto de la simetría. La mesa, que simboliza el encuentro con los seres queridos, queda perfectamente enmarcada con la textura de una alfombra sencilla.

5. Color dorado en pequeñas dosis

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Todos los colores que destacan en un espacio son relevantes porque influyen en el contexto. Existen tonos que destacan por su papel protagonista y otros matizan un entorno. El dorado es uno de esos tonos que aporta luz a un ambiente.

Esta cocina realza el protagonismo de este color en los tiradores de las puertas, en las lámparas y en la grifería.

6. Gris claro

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Es positivo crear una decoración relajante en el dormitorio porque el entorno exterior invita al descanso. Pero también es recomendable recrear esta atmósfera en el salón de casa. En esta zona de estar disfrutas de momentos de calma en el día a día. El color gris claro es uno de los tonos que marca tendencia en la actualidad. Es una alternativa frecuente al color negro, una tonalidad que es más luminosa. ¿Cómo integrar este color en el salón? Por ejemplo, con una mesa de centro de mármol o con textiles que personalizan el sofá en otoño.

Estos son, por tanto, algunos de los colores que puedes utilizar para crear espacios acogedores, modernos y relajantes. ¿Qué otros colores te gustaría recomendar a continuación? Tu color preferido puede inspirarte para personalizar el hogar.